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La salud de su bebé

Visitas médicas de rutina

Puntos claves
  • Llevar a su bebé a los chequeos médicos regulares (o visitas médicas de rutina) puede ayudar a mantenerlo sano.
  • En las visitas de rutina, el profesional médico de su bebé le controla la salud en general y se asegura de que su desarrollo esté bien encaminado.
  • Si le preocupa la salud de su bebé y cree que necesita atención médica, llame de inmediato al profesional médico del niño.
  • Si cree que su bebé necesita servicios de emergencia, llame de inmediato al 911.

¿Por qué son importantes para la salud de su bebé los chequeos de rutina?

Aun cuando todo marcha bien, los chequeos médicos regulares (o visitas médicas de rutina) pueden ayudar a mantener a su bebé sano. Durante las visitas de rutina, el profesional médico de su bebé le controla la salud en general, crecimiento y desarrollo. A su bebé también le dan vacunas para ayudar a protegerlo contra infecciones perjudiciales. 

¿Cuándo se le hacen los chequeos de rutina a su bebé?

La mayoría de los bebés se les hacen chequeos cuando cumplen:

  • 2 a 5 días de nacido
  • 1 mes
  • 2 meses
  • 4 meses
  • 6 meses
  • 9 meses
  • 12 meses
  • 15 meses
  • 18 meses
  • 24 meses

El profesional de su bebé puede usar un calendario distinto para los chequeos. Cuando recién conoce al profesional de su bebé o en el primer chequeo del niño, pregunte cuál es el calendario de visitas. Es posible que su bebé necesite más visitas si se enferma o tiene una condición de salud que debe tratarse o vigilarse de cerca. 

¿Qué sucede en los chequeos médicos de rutina del bebé?

En los chequeos médicos de su bebé, el profesional:

  • Grafica el crecimiento de su bebé. Eso significa que lo pesa y le mide la estatura y el tamaño de la cabeza. El profesional traza esa información en una gráfica para que usted vea cuánto está creciendo de una visita a otra. También puede ver si el crecimiento de su bebé es similar al de otros niños de la misma edad.
  • Le hace a su bebé un examen físico. El profesional chequea a su bebé de pies a cabeza para asegurarse de que está sano. Si hay problemas, le puede hacer pruebas o darle tratamientos. El profesional también puede enviarle a un profesional médico especializado en tratar bebés con ciertas condiciones médicas. 
  • Chequea el desarrollo de su bebé. El profesional de su bebé comprueba que su bebé está alcanzando los indicadores del desarrollo. Los indicadores del desarrollo son habilidades y actividades que la mayoría de los niños pueden hacer a una cierta edad. Entre los indicadores se incluyen rodar, recoger cosas y, con el tiempo, caminar y hablar.
  • Le habla a usted sobre la nutrición de su bebé. El profesional de su bebé le habla sobre lo que debe darle de comer a su bebé, cuánta cantidad y con qué frecuencia. Si está amamantando, es un momento ideal de avisar a su profesional si está teniendo problemas para alimentar a su bebé o si le preocupa la cantidad que está comiendo. Al ir creciendo su bebé, hable con el profesional sobre el momento en que comenzar con los alimentos sólidos y cuáles son los mejores para su bebé. 
  • Vacuna a su bebé. La vacunación es una inyección que contiene una vacuna que ayuda a proteger a su bebé contra ciertas enfermedades. La vacuna es un medicamento que le da inmunidad a su bebé contra ciertas enfermedades. Si su bebé es inmune a una enfermedad, significa que no se la puede contagiar.
  • Le habla a usted sobre el cuidado general de su bebé. Usted y el profesional de su bebé pueden hablar sobre lo que esperar conforme crece su bebé. Haga las preguntas que tenga y escríbalas para no olvidarse. Usted puede hablar sobre cosas como el asiento de seguridad para el automóvil y cómo evitar que su hogar presente peligros para su bebé. El profesional de su bebé puede preguntarle cómo están cuidando a su bebé usted y su familia, y si se siente estresada o abrumada. Siéntase en confianza de decirle al profesional de su bebé cómo se siente, en especial si tiene señales o síntomas de depresión posparto. Esta depresión es una condición médica grave que puede hacerle difícil cuidar de sí misma y de su bebé. No tema decirle al profesional de su bebé si se siente agotada, estresada o deprimida.

Al terminar el chequeo de su bebé, haga la cita para la próxima visita de rutina. Asegúrese de que sabe cómo contactar al profesional entre visitas si tiene preguntas o cree que su bebé está enfermo o no está actuando normalmente.

¿Cuándo debe llamar al profesional médico de su bebé?

Avise al profesional de su bebé si está preocupada o si tiene preguntas sobre la salud de su bebé. No tema llamar para hacer preguntas y decirle al profesional lo que le preocupa. Los bebés no vienen con manuales de instrucción, y no pueden decirle a usted cuando algo no está bien. Por eso es más difícil para usted saber qué hacer. Llame al profesional de su bebé si:

  • Cree que su bebé necesita atención médica, pero no atención de emergencia.
  • Está preocupada por su bebé porque no tiene buen aspecto o no está actuando normalmente, en especial si nació prematuramente (antes de las 37 semanas de embarazo), pasó tiempo en la unidad de cuidados intensivos neonatales (NICU) después de nacer o tiene problemas de salud.

Llame al profesional médico de su bebé si el niño:

  • Está comiendo menos de lo normal o muestra otros cambios en el apetito
  • Llora con frecuencia o está muy fastidioso y no es posible consolarlo; está menos activo de lo normal o se comporta de otra manera
  • Con frecuencia tiene diarrea o materia fecal suelta o líquida; está estreñido y tiene movimientos de vientre menos frecuentes de lo normal durante varios días; o tiene sangre en la orina o diarrea con sangre
  • Tiene vómitos (más que devolver o escupir) que duran más de unas pocas horas
  • Tiene fiebre y parece estar más que levemente enfermo; o tiene fiebre con vómitos, sarpullido o una tos o resfriado que no mejora o que empeora
  • Tiene dolor de oído o líquido que sale de los oídos; o tiene ojos enrojecidos o mucosidad que sale de los ojos
  • Tiene sensibilidad en el ombligo o pene, en especial con enrojecimiento, sangrado o supuración de líquido en esas áreas

Cuando tenga duda, ¡confíe en sus instintos! Si está preocupada por su bebé, llame al profesional del niño. Si cree que es una emergencia, llame a los servicios de emergencia (911).

¿Cuándo debe llamar a los servicios de emergencia?

Llame a los servicios de emergencia (911) de inmediato si su bebé:

  • Tiene problemas para respirar o tiene la piel o labios de color azulado, púrpura o grisáceo
  • Tiene una convulsión. Cuando un bebé tiene una convulsión, todo el cuerpo o partes del cuerpo se le mueven descontroladamente, y puede perder la conciencia.
  • Es difícil despertarlo, no está respondiendo normalmente, o está fláccido (flojo) y no puede moverse
  • Si su bebé tiene menos de 2 meses y la temperatura rectal es de más de 100.4F
  • Tiene una lesión en la cabeza y está inconsciente, está actuando raro, vomita o tiene la piel de color extraño
  • Tiene sangrado que no para o tiene sangre en el vómito o materia fecal (caca)
  • Tiene la piel o los ojos amarillentos
  • Tiene señales de deshidratación (no tener suficiente agua en el cuerpo). Las señales incluyen menos de seis a ocho pañales mojados en 24 horas; ojos hundidos; punto blando hundido (fontanela) en la parte superior de la cabeza; o no le salen lágrimas al llorar.

Si cree que su bebé se envenenó, llame de inmediato a los servicios de emergencia (911) o a la línea de ayuda de Poison Control (Emergencia por envenenamiento o intoxicación) al 1-800-222-1222. El envenenamiento o intoxicación puede suceder al tragar, respirar o tocar sustancias perjudiciales. Los niños pueden envenenarse con artículos comunes del hogar, como maquillaje, champú, lociones, perfume, productos de limpieza y hasta plantas. Las señales de que su bebé puede estar envenenado o intoxicado incluyen:

  • Tener quemaduras o enrojecimiento alrededor de la boca y los labios
  • Tener aliento que huele a sustancias químicas, como gasolina o disolvente de pinturas
  • Vómitos
  • Problemas para respirar
  • Estar adormilado

Revisado en enero de 2019