Plomo
Durante los primeros dos o tres años de vida, a los niños les gusta llevarse cosas a la boca aparte de los alimentos. Mastican juguetes, prueban la arena de la playa, comen la comida del perro y así sucesivamente. Su trabajo es mantener fuera del alcance los venenos y objetos punzantes.

El plomo es un veneno muy fuerte que puede dañar seriamente el cerebro de los niños. Puede causar problemas de aprendizaje y comportamiento, complicaciones de estómago, pérdida del apetito, dolores de cabeza, estreñimiento, pérdida de la audición y anemia. (Cuando los niños tienen anemia, la sangre no puede transportar suficiente oxígeno para que las células del cuerpo actúen y crezcan bien.) El plomo es mucho más peligroso para los niños que para los adultos.

Cuanto más plomo entre en el cuerpo, mayor será el riesgo de sufrir problemas graves. Cuanto más pequeño sea el niño, mayor es el riesgo. Alrededor de 1 de cada 20 niños en edad preescolar tiene concentraciones altas de plomo en la sangre.

El envenenamiento con plomo (o saturnismo) suele ser causado por:
  • Comer el plomo que se halla en el polvo, la tierra o pinturas viejas.
  • Respirar el plomo del aire.
  • Tomar agua de tuberías que contienen plomo. Contacte al departamento de salud local para averiguar si su comunidad tiene este problema.
  • Tener contacto con el plomo de otras formas. Ejemplos: juguetes que contienen plomo, algunas persianas, algunos platos importados, materiales usados para pasatiempos y artesanías (como creación de joyas).

El envenenamiento con plomo no puede ser causado por masticar un lápiz o por recibir una punción con la punta de un lápiz. La mina de los lápices no está hecha de plomo sino de grafito. La pintura que reviste los lápices tampoco contiene plomo.

El plomo en juguetes y joyas de juguete
Es posible que los juguetes viejos y aquéllos fabricados en otros países tengan plomo. Puede estar presente en la pintura o en los plásticos utilizados para fabricar juguetes. El niño puede exponerse al plomo cuando se lleva esos juguetes (o los dedos que tocaron los juguetes) a la boca.

El plomo en las pinturas viejas
Antes del año 1978, era común usar plomo en las pinturas. Algunas de esas pinturas todavía existen en viviendas y edificios antiguos; es decir, en paredes, puertas, ventanas y armarios. Al envejecer la pintura, puede descascararse y saltarse. Los bebés pueden levantar las cáscaras pequeñas de pintura y llevárselas a la boca. O bien es posible que el polvo de la pintura vieja les contamine las manos y la comida.

Si vive en una casa construida antes de 1977
Es posible que su vivienda, en especial si se construyó antes de 1960, tenga niveles peligrosos de plomo.

  • Considere inspeccionar su casa para ver si tiene plomo. El departamento de salud local puede ayudarle a encontrar un inspector. Si el inspector encuentra plomo en su casa, pida consejos sobre cómo sacarlo comunicándose con el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD), al (800) RID-LEAD, o con el Centro Nacional de Información sobre el Plomo al (800) 424-5323.
  • Fíjese si hay pintura descascarada o que se está saliendo. Límpiela con agua. Para reducir el plomo en el polvo, lave frecuentemente los pisos, porches, ventanas, descansos de las ventanas y otras superficies planas.
  • A menudo los niños se exponen al plomo cuando se remodela la casa. Las reparaciones (como el lijado o raspado de pintura) puede causar el polvo con plomo. Contrate trabajadores entrenados para trabajar sin riesgo en las viviendas que contienen plomo. Es posible que usted y sus hijos deban mudarse mientras se realizan los trabajos. Su departamento de salud local podrá aconsejarle.
  • Si está rentando una casa y le preocupa el plomo, pida asistencia al departamento de salud local. El dueño de su casa es responsable de realizar las reparaciones sin riesgos.

Qué otras cosas puede hacer para proteger a su hijo contra el envenenamiento con plomo
Asegúrese de que usted y sus hijos se laven las manos antes de comer.

  • Si cree que un juguete puede tener plomo, tírelo a la basura.
  • Consulte el sitio web de la Comisión de Seguridad de los Productos del Consumidor (CPSC) para averiguar si se han retirado del mercado ciertos juguetes por tener plomo. O bien llame al (800) 638-2772.
  • Deje correr el agua del grifo durante un minuto antes de beberla o de cocinar con ella.
  • Evite comidas enlatadas de otros países.
  • Lea las etiquetas de los juegos de pinturas y artículos de arte para niños. Asegúrese de que no contengan plomo.

Para más información

  • Centro Nacional de Información sobre el Plomo, (800) 424-5323

Abril de 2008