Amniocentesis
La amniocentesis (también llamada �amnio�) es una prueba prenatal común utilizada para diagnosticar ciertos defectos congénitos o de nacimiento�y trastornos genéticas. Las afecciones genéticas son problemas de salud y defectos congénitos que se transmiten del papá y la mamá al bebé. Éstas pueden causar problemas de salud para el bebé.

La amniocentesis es diferente de otra prueba prenatal llamada muestra de la vellosidad coriónica o placentaria (CVS, por sus siglas en inglés). Hable con su profesional de la salud para averiguar si debe hacerse la amnio, la CVS u otras pruebas prenatales.

La Asociación Americana de Obstetras y Ginecólogos (ACOG, por sus siglas en inglés) recomienda que todas las embarazadas tengan la opción de hacerse pruebas prenatales como la amniocentesis. Su profesional de la salud podrá recomendar que se haga una amnio si corre el riesgo de tener un bebé con un defecto congénito. La mayoría de las mujeres que se hacen la amnio descubren que su bebé está bien.

Durante la amnio, el profesional de la salud toma una pequeña muestra de líquido amniótico. El líquido amniótico es el fluido que rodea a su bebé en la matriz. La muestra se utiliza para chequear la salud de su bebé.

Es mejor hacerse la amnio durante el segundo trimestre, entre las 15 y 20 semanas de embarazo. La amniocentesis antes de las 15 semanas ya no se recomienda porque conlleva un mayor riesgo de aborto espontáneo y otras complicaciones. La amniocentesis en el tercer trimestre puede hallar infecciones en el útero (matriz) o chequear si los pulmones de su bebé están suficientemente desarrollados si surge un nacimiento prematuro.

¿Cuáles son algunas de las razones para hacerse la amnio?
El profesional de la salud debe ofrecerle una amnio y usted puede pedir una. Quizás desee hacerse una amnio si corre el riesgo de tener un bebé con un defecto congénito. Esos riesgos incluyen:

  • Ser mayor de 35 años inclusive. El riesgo de tener un bebé con ciertos defectos de nacimiento, como el síndrome de Down, aumenta con la edad.
  • Haber tenido otro hijo o embarazo con un defecto congénito. Si tuvo un hijo o embarazo con un defecto congénito en el pasado, el profesional de la salud debe ofrecerle esta prueba.
  • Resultados anormales en la prueba de detección. La prueba de detección es por lo general un análisis de sangre para ver si usted o su bebé tiene más probabilidades que otros de tener un cierto problema de salud. Se diferencia de una prueba de diagnóstico que le indica si tiene o no un determinado problema de salud. Si tiene resultados anormales en una prueba de detección, el profesional debe ofrecerle la amniocentesis. La mayoría de los bebés cuyos resultados de la prueba de detección son anormales nacen sanos.
  • Historial médico familiar de un problema genético. Si usted, su pareja o un miembro de cualquiera de sus familias tiene una afección genética, como fibrosis quística o anemia falciforme, quizás le convenga hacerse una amnio.

¿Cómo se realiza la prueba?
La amniocentesis toma unos minutos.

Primero, su profesional de la salud le pide que se acueste boca arriba. Utiliza el ultrasonido para encontrar a su bebé, la placenta y las bolsas de líquido amniótico. Luego le limpia el abdomen con un líquido antibacteriano que destruye los gérmenes de su piel.

Luego, guiándose por el ultrasonido, su profesional le inserta una aguja delgada por el abdomen y útero hasta el saco amniótico. Con la aguja extrae alrededor de 1 a 2 cucharadas (1 onza) de líquido.

Una vez tomada la muestra de líquido, su profesional de la salud chequea con el ultrasonido que el ritmo cardíaco del bebé sea normal.

La muestra de líquido amniótico se envía a un laboratorio, donde se examina y analiza. En el laboratorio, se separan las células de su bebé del líquido amniótico. Si se analiza la muestra de su bebé para ver si tiene problemas genéticos, se dejan crecer las células en el laboratorio durante 10 a 12 días aproximadamente para que haya suficientes y poder comprobar si hay problemas. Los resultados de estas pruebas suelen estar listos en 2 semanas.

Es posible que el laboratorio analice el líquido amniótico de su bebé para detectar la presencia de proteínas como la alfa-fetoproteína (AFP). Al medir la cantidad de AFP, se puede comprobar si su bebé tiene defectos del tubo neural (NTD). El tubo neural es la parte del bebé en desarrollo que se convertirá en el cerebro y la médula espinal. Los niveles de AFP suelen ser más altos si su bebé tiene un defecto del tubo neural. Los resultados de la prueba de AFP normalmente están listos en unos días.

¿Tiene riesgos la amniocentesis?
Algunas mujeres opinan que hacerse una amnio no es doloroso. Otras sienten dolor menstrual cuando la aguja penetra el útero o bien presión cuando se extrae el líquido. De una a 2 de 100 mujeres (1 al 2 por ciento) tienen dolores menstruales, manchas de sangre o goteo de líquido amniótico después de la prueba. Su profesional de la salud podrá indicarle evitar la actividad intensa y descansar el resto del día.

Las complicaciones graves de la amniocentesis son poco comunes. Sin embargo, la prueba conlleva un pequeño riesgo de aborto espontáneo. Según la ACOG, menos de 1 en 200 mujeres (menos del 1 por ciento) tiene un aborto espontáneo después de una amniocentesis.

¿Qué ocurre después de la prueba?
En la mayoría de los casos, los resultados de la amnio muestran que el bebé es sano y no tiene defectos congénitos. Si la prueba muestra que su bebé tiene un defecto congénito, hable con su profesional de la salud acerca de sus opciones. Por ejemplo, es posible que pueda tratarse al bebé con medicamentos o incluso con cirugía antes del nacimiento. O quizás haya tratamientos o cirugía que pueden realizarse después del nacimiento. Saber de antemano que su bebé tiene un defecto congénito podrá ayudarle a prepararse emocionalmente para cuidar a su bebé. Usted también puede planear el nacimiento de su bebé con su profesional de la salud para asegurarse de que reciba el cuidado especial que necesita en cuanto nace.

¿Qué pasa si no está segura que desea hacerse la amnio?
La decisión de hacerse una amniocentesis es personal. Hablar con asesores en genética, su profesional de la salud y líderes religiosos y espirituales puede ayudarle a tomar decisiones sobre las pruebas para detectar defectos congénitos durante el embarazo.

Pregunte a su profesional si existen otras opciones de pruebas prenatales y cómo buscar un médico capacitado y con experiencia en pruebas particulares. Aprenda lo más posible sobre las pruebas prenatales que le recomiende su profesional para adoptar las decisiones más acertadas para usted y su bebé.

¿Cómo puede reducir el riesgo de los defectos congénitos?
Aprenda lo que puede hacer para tener buena salud antes y durante el embarazo para contribuir a reducir su riesgo de defectos congénitos y mejorar sus probabilidades de tener un embarazo sano y un bebé sano.

Actualizado en octubre de 2012