Al poco tiempo de nacido el bebé, se le harán análisis o pruebas de detección para detectar trastornos metabólicos, es decir las enfermedades de la composición química del cuerpo. Algunos de esos trastornos son mortales si no se los trata con rapidez. Otros pueden crear problemas de por vida. March of Dimes recomienda hacer análisis a todos los bebés para detectar al menos 31�trastornos metabólicos y la pérdida de audición. Este es un buen momento para usted informarse sobre estas pruebas que se le harán a su bebé antes de que se vaya a la casa del hospital.�
Su bebé: La piel del bebé se está tornando más tersa al depositarse capas de grasa en todo el cuerpo. Esa grasa le ayudará al bebé a regular su temperatura corporal después del nacimiento. Las uñas de las manos y los pies y las pestañas están totalmente formados y siguen creciendo. El bebé tiene alrededor de 16 pulgadas (41 cm)�de largo de cabeza a pies y pesa aproximadamente 3 libras (1.36 kg).
Su cuerpo: Probablemente piense que no hay forma de que el abdomen le crezca más, ¡pero ya verá! Seguirá aumentando aproximadamente una libra por semana. La cadera y pelvis se están aflojando y expandiendo para darle lugar al bebé que crece. Sentirá incomodidad cuando el bebé le patee las costillas y el diafragma (el diafragma es el músculo que separa el pecho del abdomen). Pronto el bebé se moverá hacia abajo y se sentirá menos pesada.
Lo que puede hacer: Éste es el momento de evaluar las causas de estrés en su vida y tratar de eliminar algunas. Propóngase dedicar tiempo cada día a descansar, meditar o hacer algo activo. Hable con el profesional de la salud antes de hacer cualquier ejercicio. Permita que otras personas la ayuden. Podrá retribuirle el favor a otra mujer embarazada en el futuro. Pida a su familia y amistades que la ayuden, en especial con los quehaceres del hogar y con el cuidado de sus otros hijos.